¿A veces te sientes triste y no sabes por qué? ¿Quisieras pasar desapercibido por la maestra que te pregunta la lección? ¿Te gustaría ser popular? ¿Sientes que tus padres no te comprenden? ¿No te gusta cómo eres? Relájate. No eres la única persona que pasa o ha pasado por esto. En tu carta dedicaste un punto a cosas que no te gustan de tu aspecto físico o tu forma de ser. ¿No la escribiste? A lo mejor fue para no afrontar aquello que te desagrada de ti mismo. Cuántas veces no oímos a otras personas decir “Si fuera más delgado...” “No me gusta mi cabello rizado, si lo tuviera...” “Si tuviera más dinero...” “Si tuviera la capacidad de hacer tal cosa”...... Sería más feliz.La felicidad no depende de cosas externas o de nuestro aspecto físico. La felicidad está dentro de cada uno de nosotros.Ya sé que esto en palabras queda muy bonito, pero a ti lo que te sigue preocupando en este momento es el grano que te salió en la cara, o no caerle bien a tus amigos, o no rendir lo que se espera de ti en los deportes y/o en la escuela. Sin embargo, piensa si es de utilidad quedarse ahí sentado, preocupado por lo que no tienes o no eres, o es mejor aceptarte como eres y luchar por cosas importantes como tus ilusiones y metas. Si vas por la vida tratando de ganar amigos con quejas y lamentándote de tu persona, quizá logres lo contrario, que la gente se aleje de ti por pesado. Si en cambio, te valoras a ti mismo, te quieres y cuidas, puede ser que contagies a los demás de las ganas de vivir y de ver las cosas de forma positiva. ¡TU ELIGES!
domingo, 4 de enero de 2009
¿A veces te sientes triste y no sabes por qué? ¿Quisieras pasar desapercibido por la maestra que te pregunta la lección? ¿Te gustaría ser popular? ¿Sientes que tus padres no te comprenden? ¿No te gusta cómo eres? Relájate. No eres la única persona que pasa o ha pasado por esto. En tu carta dedicaste un punto a cosas que no te gustan de tu aspecto físico o tu forma de ser. ¿No la escribiste? A lo mejor fue para no afrontar aquello que te desagrada de ti mismo. Cuántas veces no oímos a otras personas decir “Si fuera más delgado...” “No me gusta mi cabello rizado, si lo tuviera...” “Si tuviera más dinero...” “Si tuviera la capacidad de hacer tal cosa”...... Sería más feliz.La felicidad no depende de cosas externas o de nuestro aspecto físico. La felicidad está dentro de cada uno de nosotros.Ya sé que esto en palabras queda muy bonito, pero a ti lo que te sigue preocupando en este momento es el grano que te salió en la cara, o no caerle bien a tus amigos, o no rendir lo que se espera de ti en los deportes y/o en la escuela. Sin embargo, piensa si es de utilidad quedarse ahí sentado, preocupado por lo que no tienes o no eres, o es mejor aceptarte como eres y luchar por cosas importantes como tus ilusiones y metas. Si vas por la vida tratando de ganar amigos con quejas y lamentándote de tu persona, quizá logres lo contrario, que la gente se aleje de ti por pesado. Si en cambio, te valoras a ti mismo, te quieres y cuidas, puede ser que contagies a los demás de las ganas de vivir y de ver las cosas de forma positiva. ¡TU ELIGES!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario